Cultiva estos hábitos
Las relaciones más estrechas, como las amistades cercanas, una pareja satisfactoria y los lazos familiares fuertes influyen positivamente en el bienestar y la vitalidad del cuerpo y la mente. Estos vínculos sociales positivos contribuyen a la felicidad. Una buena amistad, un amor correspondido, una conversación o una aventura compartida con amigos deja recuerdos que nutren el alma. La fórmula de las relaciones duraderas, ya sea de pareja, laborales o de cualquier tipo, incluye el respeto, la comunicación y la honestidad, entre otras cosas.
“No hay jefe en nuestra relación. Ambos damos y tomamos”, comentó hace unas semanas a la estación radial de la BBC Joyce Bond. Ella y su esposo Ron cumplieron este año 81 años de casados y su aniversario fue muy celebrado en Inglaterra, su país.

El éxito y la durabilidad de las relaciones de pareja, de acuerdo con el psicólogo norteamericano Robert Sternber, dependen principalmente de la confianza mutua y la reciprocidad del sentimiento de seguridad que provee el vínculo.
Y algo muy importante, hay que cuidarlas. No sólo en tiempos difíciles, sino en todo momento, pues aunque las des por seguras se pueden enfriar con el paso del tiempo.
En su libro “La Nueva Psicología del Amor”, la antropóloga Helen Fisher, menciona que si el afecto va acompañado de una decisión voluntaria, las relaciones pueden durar toda la vida.
Estas son algunas de las principales acciones que debes practicar para cuidar tus relaciones y mantener vínculos fuertes por muchos años:
- Honestidad
En cualquier tipo de relación ser honesto con el otro es importante, pero no se trata sólo de no decir mentiras o no engañar, sino de dar nuestra opinión y hablar de frente sobre lo que pensamos, sin intermediarios.
- Confiabilidad
Crear un vínculo de confianza acerca y fortalece las relaciones. Sé congruente con lo que dices y haces, comparte anécdotas sobre tu vida y momentos en los que te sentiste vulnerable.
- Espontaneidad
Sé tú mismo sin temor a ser juzgado. La espontaneidad es actuar libremente sin la rigidez de las normas o de querer encajar. Siempre con respeto.

- Empatía
Esto significa ponernos en los zapatos del otro. Hablar de uno mismo o escuchar las anécdotas ajenas no es suficiente, hay que comprender su situación.
- Saber escuchar
La atención que pones cuando el otro te cuenta algún suceso da confort. Escucha sin interrumpir y demuestra que estás poniendo atención teniendo interacción con lo que te platican.
- Estar en contacto
Con las redes sociales y la mensajería instantánea es más fácil estar en contacto con los amigos y familiares. Date el tiempo para saber cómo están: una llamada, un mensaje o una breve visita mantiene vigente la relación. También responder las que los otros te hacen es importante.
Con información de la revista especializada Psicología y Mente.