Date un respiro para recobrar energia
El trabajo, las vueltas diarias, las prisas, los pendientes, las responsabilidades, los compromisos sociales, el ir y venir de un lado a otro por toda la ciudad… ¿Te suena familiar? Es hora de un tiempo para descansar. Quizá te encuentres dentro de una rutina en la que no dejas de estar haciendo cosas, pero, ¿te has preguntado acerca de los beneficios de tener un tiempo para justamente no hacer nada?

Los holandeses tienen un término que se llama «niksen», que es justo eso: no hacer nada con el fin de brindarte una reconexión contigo mismo, respirar del agobio de la rutina y “cargar pila”.
Y, aunque parece muy sencillo eso de no hacer nada, expertos señalan que nos es muy complicado lograrlo por la alta demanda de actividades que tenemos en el día, y por la culpa y la vergüenza que nos puede provocar dejar de ser “productivos”.
“En la búsqueda de éxito que exige esta sociedad, definiendo éxito como tener dinero, propiedades y un carro de reciente modelo, el descanso mental, físico y el no hacer nada está muy penado; entonces, cuando nos queremos dar un descanso sentimos culpa”.
Señala Érika Oranday Treviño, psicóloga especialista en Coaching Laboral.
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“De la exigencia que tenemos desde niños por vivir en una cultura de trabajo que normaliza estar ‘acelerados’ y demasiado ocupados, y se ve mal querer tomar un break. Nos hemos hecho rehenes de frases como ‘no estás dando el cien’, o ‘no estás dando tu máximo’”.
De acuerdo con la especialista, el prototipo de varón proveedor y abundante, y el de la mujer que tiene que realizar múltiples actividades tanto en la casa como en el trabajo motivan a las personas a sobrecargar su agenda y olvidar que necesitan del ocio para equilibrar su salud física, mental y emocional.
“Afortunadamente las nuevas generaciones están valorando más el tiempo y el esparcimiento, que el dinero”, afirma.
Cómo identificar que te hace falta un descanso
Para identificar que te urge hacer una pausa debes prestar atención a síntomas como dolor de cabeza, espalda, irritabilidad, cansancio de la vista y poca concentración. Estos son algunos de los indicativos que avisan que estás abusando de tu capacidad para atender decenas de cosas en el día.
“Agendar un espacio y un tiempo para no hacer nada durante 15 minutos dos veces al día, para estar en silencio o sencillamente fijar la vista en un solo punto es muy benéfico para nuestra salud”.
Érika Oranday Treviño, psicóloga especialista en Coaching Laboral.

La experta señala que hacer esas pausas de manera obligada impactan inmediatamente en nuestra creatividad, estado de ánimo y en la capacidad de tomar mejores decisiones.
El tiempo para descansar es una buena práctica
Es importante aclarar que no estamos hablando de abusar del descanso o de exigir en nuestras áreas de empleo menos horas de trabajo.
La diferencia entre “flojear” y buscar un espacio para no hacer nada, está en posponer todas las actividades para después poner en riesgo los buenos resultados de sus metas.
“Estamos hablando de los beneficios de ‘desconectarse’ un momento de la rutina, pero no de extender malas prácticas bajo la justificación de la salud”.

Cómo saber que no estas procrastinando
Una palabra que ahora suena mucho es la procrastinación, en resumen, significa no concretar. Postergar se ha vuelto regular entre algunas personas que tienen déficit de atención, y ese no concretar se traduce en angustia, preocupación, falta de motivación, estrés y miedo constante a ser despedido del trabajo.
“Cuando se espera que hagas una actividad o des un resultado en algún sitio y no se realiza, ahí es donde es ya un problema, porque es falta de compromiso. Sin embargo, si el resultado se está logrando, el descanso no debe ser mal visto”.

Así que ya lo sabes, busca maneras de tomar tiempo para descansar, ayudará a tu mente y a tu cuerpo a recargar energías.