La pandemia de COVID-19 no solo reconfiguró nuestra forma de trabajar, sino que también alteró profundamente la visión de las nuevas generaciones sobre lo que significa el éxito y cómo ser feliz.
Según Jorge Rosas, especialista en Desarrollo Humano, para ser feliz no se necesita éxito profesional, sino que es un componente esencial que debe coexistir con él, impulsando un balance entre la vida personal y laboral.
Este cambio de paradigma exige una transformación radical en el liderazgo. Ya no basta con dirigir equipos; es fundamental construir una conexión genuina que fomente el crecimiento y supere los miedos inherentes a los desafíos.
Un líder actual tiene la responsabilidad de desafiar a sus colaboradores a salir de su zona de confort, al mismo tiempo que les brinda el apoyo necesario para prosperar. En este nuevo escenario, el rol del líder es crucial para ayudar a las personas a superar el miedo a tiempo, permitiéndoles alcanzar su máximo potencial en un entorno que prioriza tanto la productividad como el bienestar.
Ser feliz y lograr tus objetivos
Jorge destaca que si bien la felicidad antes dependía mucho del éxito, las generaciones actuales han redefinido este concepto. Para lograr el éxito se necesita encontrar la felicidad en lo que hacen actualmente. La felicidad y la salud, van muy de la mano en lograr el éxito gracias a que el bienestar es muy importante.
Las nuevas generaciones demandan un equilibrio entre la vida laboral y personal, así como flexibilidad, una tendencia que ha llegado para quedarse. Esta necesidad es crucial, ya que el cuidado personal es indispensable para dar lo mejor de sí mismo.
Ante este cambio de paradigma, subraya la necesidad de transformar el liderazgo para fortalecer la conexión con los equipos de trabajo.
Es crucial motivar al equipo de manera que se evite el burnout por exceso de trabajo, el cual puede generar ansiedad. Al mismo tiempo, es importante no reducir la carga laboral en exceso para evitar el aburrimiento. El objetivo es encontrar un equilibrio que permita al equipo trabajar de manera fluida y eficiente.
También es importante destacar que el tiempo intensifica el miedo, haciendo que iniciar nuevas actividades, como aprender un idioma o emprender un proyecto, se vuelva más difícil con cada momento que pasa. Por lo tanto, es esencial que los líderes desafíen y apoyen activamente el desarrollo de sus equipos, guiándolos para superar el miedo de manera oportuna.
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