Se un buen amigo y apoya a tus verdaderos amigos
Mariana y Karla son amigas desde niñas. Ahora, como adultas, han atravesado problemas de todo tipo: sentimentales, financieros, legales y familiares. A pesar de ello, han sabido mantener el buen ánimo, asegurándose de estar la una para la otra cuando se necesita. En esta ocasión te presentamos «7 Consejos para apoyar a tus amigos en sus momentos difíciles»
“Mantener una amistad y hacerla duradera requiere de mucha empatía y acompañamiento, no solo en los momentos felices sino también en las circunstancias más difíciles, brindando apoyo cuando es necesario”, cuenta Karla..

No siempre se trata de ayudar a ciegas y preparar el camino para que nuestros seres queridos no afronten sus problemas, a veces lo más difícil es entender y respetar que hay situaciones que se deben resolver de forma personal y que nuestro lugar es más de acompañante y oyente, y no de un buscador de soluciones.
Respetar a nuestros amigos incluye darles tiempo para afrontar su dolor y espacio para que preparen su proceso de superación, pasando por episodios de frustración y enojo correspondientes a cada tipo de problema.
“Es importante escuchar, antes de dar una opinión sobre los problemas de los demás, y siempre preguntarle a la otra persona si está interesada en escuchar nuestra opinión”, explica la psicoterapeuta Irene del Valle.

¿Quieres saber cómo ayudar a un buen amigo en problemas? estos son 7 consejos que te servirán. Recuerda siempre pensar en su bienestar emocional y poner el respeto por encima de todo.
1.- Somos oyentes
El primer paso para ayudar es escuchar, y hacerlo con respeto es la clave para no lastimar más a nuestras amistades en sus momentos más vulnerables. Somos oyentes y como tales tenemos que estar preparados para saber reaccionar a los sentimientos de las personas que queremos, ya sea tristeza, enojo o impotencia. De no ser así o si no estamos pasando por un buen momento, lo más importante es ser sinceros con nosotros mismos y definir si podemos apoyar o no.
2- No hay problema menor
No todas las personas tenemos la misma resistencia o capacidad para afrontar conflictos. “Muchas veces cuando vemos que nuestro ser querido maximiza sus problemas, minimizamos su situación, siendo poco empáticos. Lo importante es hacerle saber a esa persona que entiendes lo difícil del momento y que sus emociones son válidas” dice Del Valle al respecto.
3- No son tus problemas
A veces pensamos que los problemas de los demás son nuestros, creyendo que sabemos qué es lo mejor para esa persona, pero no siempre es así, hay casos en que podemos empeorar la situación si intervenimos. Cuando nos convertimos en gestores de soluciones, le restamos autonomía a la persona que afronta la situación. “Lo mejor es dejar que esa persona decida qué hacer, porque de esa manera ella será dueña de la situación y de los cambios que debe hacer para salir adelante”, dice la experta.
4- No siempre aplicará tus consejos
Que una persona en problemas te pida un consejo no significa que lo seguirá al pie de la letra. A veces solicitamos este tipo de intervenciones con la idea de ajustarlas a nuestras posibilidades. Recuerda que todos los problemas se ven diferentes desde afuera y que no siempre la solución que nosotros aplicamos será la más adecuada para la realidad que vive otra persona.

5- Pon atención a los detalles
Ten cuidado siempre con la manera en que te expresas. Trata de usar un lenguaje de aliento sin caer en lo burlesco. No traigas situaciones del pasado ni busques comparar la situación de otra persona con la de tu amigo. Evita todo lo que pueda provocar un malentendido o cualquier actitud que pueda ser desagradable u ofensiva, piensa que tu amigo está en un momento vulnerable.
6- Ayuda consensuada
Brindar ayuda es algo que sin duda hace sentir bien a las dos partes, pero siempre ten en cuenta que debes informar a la otra persona para evitar malentendidos. Si se trata de problemas financieros o emocionales, piensa antes de buscar alternativas, habla con la persona que atraviesa el problema sobre su situación y si está dispuesta a compartirla con otras personas, para buscar soluciones en lo colectivo.
7- No te olvides de ti
Es importante cuidarnos y atender nuestras necesidades emocionales antes de ayudar al otro, aconseja Del Valle.
1. Ten un espacio para desahogarte y expresar lo que sientes
2. Conoce tus límites y responsabilidades dentro de la situación del otro.
3. Pide ayuda y apoyo psicológico si te afecta demasiado o se te sale de las manos.
Te puede interesar: Regalos para darle a tu mejor amiga este San Valentín