10 consejos para organizar el refrigerador

Organizar el refrigerador puede hacer tu vida más fácil

¿Necesitas tips para aprovechar al máximo tu refrigerador? Te ayudamos con estos 10 consejos para que tu vida más fácil. Organizar el refrigerador es una actividad que puede quitarnos mucho tiempo a la hora de hacer las compras, por ello, la mejor opción es que te hagas de un sistema que te sea útil y simplifique esta tarea. 

A continuación, te damos 10 consejos para que sepas cómo organizar los alimentos en el refrigerador. 

1. La puerta es la zona más cálida

La regla aplica sin tomar en cuenta los tipos de refrigerador que existen, por lo que es aconsejable que productos como la leche no los pongas en esa zona. 

¿Qué alimentos sí? Mantequilla, jugos, salsas envasadas, etc. En realidad, en los estantes de la puerta deberían ir alimentos que tarden en echarse a perder, ya que al abrir constantemente el refrigerador, son los primeros en estar expuestos a la temperatura del ambiente. 

2. Las carnes van en la parte más fría del refrigerador

Hay refrigeradores, como los modelos bottom mount que, además de contar con los cajones de las verduras, también incluyen uno para las carnes, que generalmente está ubicado en la zona inferior del refrigerador. 

No obstante, en los refrigeradores top mountain esta zona no está especificada, por lo que habrá que colocar las carnes en el estante que está antes del cajón de las verduras. 

Asimismo, es importante que tengas contenedores de comida destinados a cada tipo de carne, de esta forma sus jugos no contaminarán otros alimentos dentro del refrigerador. 

Un recipiente hermético, ya sea de plástico o de vidrio, como este modelo de Procook, funciona bien para guardar la carne. Incluso puedes comprarle una rejilla para que los jugos queden en la parte de abajo. 

3. Separa las frutas de las verduras

Los refrigeradores de puertas francesas ofrecen una gran ventaja respecto a la separación de frutas y verduras, ya que al ser dobles, cada grupo puede tener su cajón. 

Resulta fundamental realizar este procedimiento, ya que el grado de maduración de algunos alimentos podría afectar el de otros, descomponiéndolos de forma precipitada. 

¿Qué puedes hacer si solo tienes un cajón? Dividirlo mediante contenedores para refrigerador, así pondrás las frutas en uno y las verduras en otro. 

Por ejemplo, el contenedor de plástico para refrigerador Ms-013 de la marca Baum Brothers es adecuado para separar las frutas de las verduras y evitar que los procesos de maduración interfieran con el tiempo de vida de los alimentos. 

Frutas que van en el refrigerador

• Frutos rojos (fresas, frambuesas, moras, cerezas, arándanos, zarzamoras). 
• Melón y sandía. Una vez que ya están cortados es mejor mantenerlos en un recipiente hermético. 
• Duraznos cuando ya estén en el punto máximo de maduración.
• Plátanos. Cuando ya estén maduros, mételos en una bolsa de papel y luego al refrigerador. Su cáscara se pondrá oscura, pero por dentro se mantendrán en buen estado.
• Aguacate. 

Verduras que se refrigeran

• Lechuga y otros vegetales de hoja verde, almacenados exclusivamente en el cajón de verduras y, de ser posible, en una bolsa de plástico cerrada para evitar que las hojas se “quemen” por el frío. 
• Apio, pepino y zanahoria. Se conservan mejor en el refrigerador, pero pueden perder sabor y aroma. 
• Pimientos y calabazas. También hay que guardarlos en bolsas en el cajón de las verduras si no vamos a consumirlos el día que los compramos, pero sí en la semana. 

4. En el estante más alto coloca los embutidos

Hay varios tipos de refrigeradores que incluyen una bandeja para las carnes frías y que está situada justo debajo del estante superior. Si tu refrigerador no cuenta con uno, basta con que los coloques en el primer estante. 

Otra opción es adquirir un recipiente específico para carnes frías.

5. Los lácteos, de preferencia, en el estante medio del refrigerador

Esta zona es la que recibe una temperatura de forma constante dentro de todo el refrigerador, así que es ideal para la leche, el yogur y los quesos. 

También es el mejor lugar para guardar las sobras de comida y otros productos ya abiertos, como las conservas. 

Los refractarios con tapa, principalmente los de vidrio, son una gran alternativa para almacenar los restantes de comida, ya que este material se caracteriza por no generar manchas ni olores. 

6. Las bebidas y los condimentos a los estantes de la puerta

Esta regla aplica para los productos pasteurizados y con conservadores que pueden soportar mejor los cambios de temperatura. 

En el caso de los jugos naturales, puedes colocarlos en el último estante pegado a la puerta para protegerlos de su proceso de fermentación natural. 

7. Organiza los alimentos por prioridad de consumo

Ahora que ya sabes qué va en qué estante y cuál es la temperatura dependiendo de la zona del refrigerador, procura organizar tus insumos de forma que hasta adelante queden los que vas a utilizar primero o con mayor frecuencia. 

Igualmente revisa la fecha de caducidad para que puedas poner al principio los alimentos que tardan menos tiempo en echarse a perder. Esto asegurará que los tengas a la vista todo el tiempo. 

8. Separa los alimentos para que reciban la temperatura de manera uniforme

Una vez que ya tienes clasificados los grupos de alimentos y cómo los vas a acomodar, no los amontones unos con otros, aunque estén en refractarios. Lo mejor es que exista un espacio entre cada uno de ellos dentro del estante para que el aire frío circule. 

9. Utiliza el congelador sabiamente

Fuera de los productos propiamente congelados, -como frutas y verduras-, o los que propiamente deben ir ahí -como los hielos y helados-, si vas a utilizar el congelador, hazlo de forma planificada. 

Por ejemplo, si compraste una carne que no sabes muy bien cuándo utilizarás, pero sabes que no será dentro de los primeros días después de su compra, congélala. Evita, en la medida de lo posible, pasar un alimento al congelador cuando ya pasó tiempo en la zona del refrigerador para no desperdiciarlo. Lo más probable es que la consistencia y propiedades del alimento cambien y, al final, se eche a perder con este movimiento. 

10. Inspecciona tu refrigerador una vez a la semana

Saca todo lo que ya no sirve o no vaya a ser consumido y vuelve a organizar lo que aún sirve con lo nuevo que hayas comprado. 

Este tip te ayudará a mantener un orden, pero también a procurar que los alimentos dentro estén en buen estado. ¡Ya sabes cómo organizar el refrigerador como toda una experta!